Amo mi mundo mágico pero me siento atraída por nuevas cosas, por ese mundo que tengo miedo de explorar, la nueva etapa.. Esa etapa que me devolverá la ilusión de vivir, la pasión, el deseo, el amor que nunca encontré. Asi que a veces cierro los ojos y me comvierto en oruga cuando quiero escapar de la realidad que me rodea y me meto en mi propia crisalida o urna de cristal. Esta metamorfosis, rápida en términos de vida estelar, es bastante compleja y poco entendida pues la celestial crisálida se convierte en una mariposa cósmica, llena de alegria y ganas de vivir.... O me zambullo en el centro del mar, donde el agua fría toca cada uno de mis pliegues mientras veo un camino pequeño lleno de hilos de plata y junto a el se encuentra una muralla de arco iris guiando el camino... y quizas ahi me sienta sirena ¡recuerda que tu eres quien quieres ser!. las palabras de un amigo me rescatan del pesimismo, de la depresión y me da nueva emergía una fuerza impresionante de alguna manera renovadora como la energia que la mariposa tiene al salir de su caparazón....tiendo mis sentimientos al sol....como ella estiende sus alas.... Invento un beso y con un gran abrazo me despido... Los únicos bienes etéreos son los que acumulamos en el corazón, cuando este falta ningún tesoro lo sustituye”. besos...
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